La georreferenciación es el proceso que permite definir de manera exacta la ubicación de una parcela en el terreno, utilizando un sistema de coordenadas específico. En España, se utiliza el sistema de referencia ETRS89 junto con la proyección UTM. Esto permite localizar cualquier parcela de forma precisa y sin ambigüedades, estableciendo claramente sus límites y dimensiones, lo que resulta esencial en actividades como la compra-venta de inmuebles, la actualización de datos en el Catastro o la Coordinación entre la finca registral inscrita en el Registro de la Propiedad con la información contenida en Catastro, entre otros muchos procedimientos. Este proceso es esencial para garantizar la seguridad jurídica de una propiedad, definir sus límites, y evitar problemas futuros en operaciones inmobiliarias.
Subsanación de discrepancias en Catastro:
Es común encontrar falta de exactitud entre los datos oficiales y la realidad del terreno. Un plano georreferenciado firmado por un/a técnico competente permite realizar la subsanación de discrepancias ajustando la información contenida en Catastro a la situación real de la propiedad. Esto permite:
Regularizar Edificaciones: Muchas construcciones no están correctamente registradas en el Catastro. Un plano georreferenciado facilita su regularización.
Corregir datos de fincas y parcelas: fundamentalmente las relacionadas con sus límites, su forma y su superficie entre otras características
Las Administraciones públicas utilizan la información recogida en Catastro como base de cálculo para muchos de sus impuestos. Un plano georreferenciado ayuda a evitar pagar impuestos basados en una superficie incorrecta en:
Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)
Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)
Impuesto de Patrimonio
Impuesto de Sociedades
Inscripciones en el Registro de la Propiedad: para muchos procedimientos, el Registro de la propiedad exige, junto a otra documentación, un plano georreferenciado que servirá de justificante legal de la ubicación concreta del bien inmueble. En concreto lo solicitará en los siguientes trámites:
Inscripciones de Segregación, División, Agregación o Agrupación de fincas o parcelas.
Corrección o modificación de la descripción de una finca registral existente.
Inscripciones de Declaración de Obra Nueva (nuevas construcciones)
Inmatriculación o primera inscripción de una propiedad en el Registro
Coordinación Registro de la Propiedad - Catastro Inmobiliario: La Ley Hipotecaria y la Ley del Catastro Inmobiliario, tras su reforma en 2015, establecen un sistema de coordinación entre el Catastro Inmobiliario y el Registro de la Propiedad, para que el Registro incorpore la descripción gráfica georreferenciada de las fincas registrales, utilizando como base la cartografía catastral.
Escritura Notarial en operaciones de Compra-Venta: Habitualmente, también se necesita un plano georreferenciado en operaciones de compraventa en las que el notario pida información extra, aparte del certificado energético y la cédula de habitabilidad.
Solicitud de permisos y licencias a los Ayuntamientos: Muchos ayuntamientos requieren planos georreferenciados para otorgar licencias de construcción o modificación de fincas, asegurando que las obras respeten los límites establecidos. En concreto es necesario los siguientes procesos:
Licencias de Segregación, División, Agregación o Agrupación de fincas o parcelas
Licencias de Obra de Nueva (incluidas piscinas)
El precio de un plano certificado de coordenadas georreferenciadas depende de las particularidades del trabajo a realizar: visitas de campo realizadas, extensión de la parcela, número de parcelas, etc... teniendo en cuenta todo esto podemos considerar para orientarnos que un plano georreferenciado puede costar a partir de 220€+IVA para las situaciones más simples.
Plano georreferenciado y archivo GML: Cumple con los requisitos legales y está listo para ser presentado en el Catastro y el Registro de la Propiedad.
Informe detallado: Incluye un resumen completo con las coordenadas exactas, la forma, el perímetro, la superficie y cualquier otra información relevante para la propiedad.
Exactitud en la ubicación: Define con precisión los límites y la extensión de la parcela, proporcionando seguridad jurídica en todo tipo de transacciones.
Cumplimiento normativo: Un plano georreferenciado cumple con los requisitos establecidos por las leyes actuales, garantizando que la propiedad está correctamente registrada en el Catastro y el Registro de la Propiedad.
Resolución de discrepancias: Ayuda a corregir posibles errores en la información catastral, como superficies mal calculadas o edificaciones mal registradas, evitando conflictos futuros.
Verificación sencilla: Al estar basado en un sistema de coordenadas estándar, la localización de la parcela es fácilmente verificable en cualquier momento.
Visita y trabajo en campo (en caso necesario): Un equipo técnico especializado realiza las georreferenciación directamente en el terreno, utilizando equipos como GPS de precisión centimétrica mediante corrección en tiempo real RTK
Elaboración del plano: Los datos obtenidos se procesan en programas de software especializados de información geográfica (QGIS), para generar un plano detallado que refleje la ubicación exacta de la parcela.
Informe final: Se entrega un archivo digital en formato GML, necesario para la presentación oficial ante el Catastro, junto con un informe completo que detalla las coordenadas, superficie y límites de la finca.
GPS de precisión centimétrica: Permite obtener coordenadas exactas, reduciendo el margen de error a su mínima expresión. Las coordenadas se obtienen en tiempo real mediante procedimiento RTK o tmediante tratamiento en postprocesado PPP
Sistemas de Información Geográfica (SIG): es un sistema de información diseñado para trabajar con datos referenciados mediante coordenadas espaciales o geográficas. Compuesto por una base de datos con capacidades específicas para datos georreferenciados, juanto a un conjunto de operaciones para trabajar con dichos datos.
Un plano convencional refleja la disposición de una finca o construcción sin especificar su ubicación exacta en un sistema de coordenadas. Por el contrario, un plano georreferenciado está basado en sistemas oficiales de coordenadas, lo que garantiza que la propiedad esté representada de forma precisa y válida ante el Catastro y el Registro de la Propiedad. Esta precisión es fundamental para evitar problemas legales y financieros derivados de errores en los registros.